Checa supera uno de sus Miedos

El aeropuerto de Arecibo fue escenario de este encuentro del reguetonero con las nubes. Fue recibido por Jason González, experto del club Xtreme Divers, quien le instruyó sobre los procedimientos, seguridad y riesgos de la práctica del “sky diving”.

Luego de las detalladas instrucciones y de estampar su firma en buen número de documentos, el intérprete de “Quedó así” fue oficialmente candidato al Tandem Dive. Y tuvo tiempo de meditarlo, viendo a par de personas tirarse antes de su turno. Tiempo suficiente además para que fuera objeto de todo tipo de bromas y comentarios atemorizantes por parte de sus acompañantes. Pero Cheka estaba decidido. Cerca de las 2:00 de la tarde, tocó su hora.

Vestido con los equipos pertinentes, subió determinado a un pequeño avión que este día enfrentaba un cielo traviesamente nublado pero hermoso. Tomó algunos quince minutos alcanzar los 10,500 pies necesarios para el salto. Ahí el momento más impresionante según el artista, “cuando te asomas a la puerta a 11,000 pies de altura y ves las nubes ahí y el viento frío te quema.” Una buena caída libre a 120 millas por hora, que hasta a los que fuimos testigos de aquel puntito en el cielo pareció impresionante, fue seguida del espectáculo de maniobras aéreas en un paracaídas amarillo brillante que compartía el instructor con el cantante.

Un risueño y satisfecho Cheka, quien realizaba este salto como parte de los segmentos de entretenimiento de su próximo especial musical Web Concert Series de Primera Hora, a penas aterrizaba y ya anunciaba su próximo sky dive. Así se convirtió en el primer solista del género en lanzarse en paracaídas y ahora reconsidera lo de nadar con tiburones.