Por eso, en un acto de rebeldía y la vez de fe, decidió entrenar a una vaca para que saltara obstáculos como lo haría un caballo. Luego de un tiempo de entrenamiento, la joven montaba a la vaca y se sorprendió al ver que respondía positivamente a las pruebas.
“Tuve que enseñar todo a Luna, y a sobornarla con zanahorias y azúcar. Pero ahora ella puede saltar obstáculos de hasta un metro”, declara la adolescente alemana. Ahora se han vuelto famosas por esta gran hazaña, pues nadie se imaginaría que una vaca lograra aceptar un entrenamiento y actuar como un caballo.
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