Noticias

El hombre que pasó 34 años en prisión por crimen que no cometió

En abril de 1989, el estadounidense Sidney Holmes fue condenado a 400 años de prisión por un crimen que no cometió.

Un juez del Estado de Florida, Estados Unidos, exoneró a Sidney Holmes, un hombre afroamericano que estuvo en prisión por más de 34 años por un crimen que no cometió.

Holmes fue condenado por presuntamente por haber participado en un asalto a mano armada, y fue acusado de ser el conductor en la huida de dos hombre no identificados que robaron a un hombre y una mujer a la salida de un supermercado en Fort Lauderdale, el 19 de junio de 1988.

En abril de 1989 Sidney Holmes fue condenado a 400 años de presión y después de 35 años quedó en libertad, luego de que las autoridades revisaran su caso y determinaran que había sido condenado erróneamente.

Sidney Holmes pasó por los micrófonos de La W de W Radio para dar su testimonio del caso. Según lo señalado por el estadounidense, siempre mantuvo la esperanza gracias a su relación con Dios y la religión.

Lee también:

Así luce el tenebroso bebé que interpretó al demonio en La Pasión de Cristo

“Mi sueño no es casarme ni tener hijos”: Érika Zapata se sinceró sobre sus planes

“No sabía cuándo sería mi liberación, pero sabía ese día llegaría (…) y para salir delante de se debe perdonar, esa fue la fuerza que me dio Dios”, manifestó. Así mismo, mencionó que el arresto y posterior sentencia pudo haberse dado debido al racismo de la época.

En cuanto a momentos posteriores a su liberación, reveló que una de las cosas que hizo y que deseaba hacer fue ir a comer camarones, una de sus comidas favoritas en el restaurante Olive Garden.

Por ahora, lo más importante para Holmes, según lo señalado, es disfrutar el tiempo con su familia.

Nunca perdió la esperanza

Sidney Holmes, mencionó que trabajó sin cansancio, envió numerosas cartas, buscó diferentes abogados, hasta encontrar al abogado correcto y demostrar su inocencia.

Por último, señaló que analizará el panorama y empezará una demanda monetaria al Estado por la condena a un inocente.